Zidane se movía con la gracilidad de un bailarín. Con deslumbrante maestría y clase suprema, él orquestaba el juego con pasión desbordante. Sus pases eran milimétricos, como pinceladas magistrales en la gran https://dillanrfao786015.blogkoo.com/qué-motivó-el-gesto-de-zidane-en-2006-57851836